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¿A quién no le gustaría aprender inglés? ¿Y qué mejor que en familia? Agencia Best te lo pone muy fácil, podrás desarrollar una nueva lengua con el apoyo que se requiere y las herramientas de aprendizaje necesarias.

Aprender inglés en familia es una experiencia nueva que no tiene por qué verse nublada por trámites como alojamiento u otros preparativos del viaje, como las actividades de excursión, ya que el curso contempla varias alternativas, residencias y hoteles, así como planes culturales en el país.

Los destinos son dos puntos clave en Europa donde podrás mantenerte inmerso en el idioma, Irlanda y Reino Unido. Podrás elegir como destino a la hermosa ciudad de Londres, Galway, Dublín, Brighton o Shrewsbury y descargar un dossier informativo con características del curso, de la ciudad preferida y de las tarifas a pagar.

Si tu elección es Londres, disfrutarás de un recorrido por sus parques, museos, mercados y vistas al río Támesis. Este curso de idioma se recomienda para chicos a partir de los 8 años, que tendrán la oportunidad de aprender mucho más en clases personalizadas y grupos reducidos de estudiantes.

Por supuesto, para ser adaptado a toda la familia, el curso está disponible en diversos niveles, desde lenguaje básico hasta inglés avanzado. Las clases son orientadas al vocabulario local y a los coloquialismos propios de la ciudad, además del aprendizaje de gramática para formar frases complejas.

Estas ventajas, por su parte, se aplican a cualquier ciudad que resulte elegida, donde el aprendizaje de inglés será cada vez más rápido y práctico para obtener desenvolvimiento del habla en Europa.

Inglés en familia: cultura e idioma

Conocer la cultura de otro país a través de excursiones también sirve de apoyo a las lecciones y es parte fundamental de los cursos. Al incursionar en la cultura y lugares turísticos de la ciudad, podemos reconocer nombres de parques, museos, plazas o restaurantes en inglés y escuchar un poco sobre la historia que ha marcado estos sitios. Además, es probable que se practiquen lecciones aprendidas conversando con otros turistas o con locales que pueden hablar un poco más sobre su cultura e idioma.

Las familias tendrán la posibilidad de descubrir lugares y culturas para aprender mucho más los fines de semana y por las tardes, luego de las lecciones. También la convivencia con grupos y otras familias de acogida será de provecho al enriquecer el repertorio de palabras y para hacer amistades internacionales.