Este es uno de los lugares más particulares de Inglaterra por las características únicas que atesora y todo lo que ofrece al visitante. Al estar ubicada al sur, ofrece un clima templado que, en verano, resulta de lo más agradable para disfrutar de actividades al aire libre o pasar unas horas disfrutando del sol en sus playas.

Por eso, hoy queremos presentarte las cuatro cosas que no te puedes perder al realizar un curso con monitor en esta maravillosa ciudad llamada Bournemouth Coast.

1. La playa dorada de las siete millas:

Resulta bastante inusual encontrar playas de arena dorada en Reino Unido y, curiosamente, Bournemouth Coast es uno de los enclaves donde cuenta con ellas. Nada menos que diez kilómetros de unas playas espectaculares, ideales para compartir con familiares y amigos una tarde de verano en un clima templado ideal, entre 25 y 30 grados. El sol calienta lo justo para disfrutar, sin resultar tan caluroso como en el sur de Europa.

2. La plaza principal y sus jardines:

El centro de la ciudad se conecta con la playa a través de sus jardines, hasta confluir con la plaza principal. Un contexto que resulta de lo más cálido y acogedor, tanto por su gente, como por las actividades del lugar. Conciertos y espectáculos de fuego, espacios para reuniones, hacer picnics, tomar un café en una terraza y disfrutar de un buen helado conforman un entorno de lo más agradable para disfrutar allí de una temporada aprendiendo inglés.

Además, también hay tiendas con numerosas cadenas de comida rápida y centros comerciales. Un lugar de ocio que cuenta con todo lo necesario para ofrecer la mejor experiencia tanto a sus lugareños como al turismo.

3. El triángulo central:

En el centro de Bournemouth Coast existen tres calles interconectadas entre sí donde sentirás como si estuvieras saltando directamente a otra ciudad en cuestión de unos pasos por lo mágico y particular de la fusión de matices dentro de un mismo lugar: calles llenas de arte, cultura, música en directo, restaurantes y donde se condensa el ocio. Además, aquí también encontrarás la biblioteca de la ciudad.

4. La iglesia de San Pedro:

Ejerce como la catedral de la ciudad. Es una iglesia bonita, de estilo gótico, donde acuden los habitantes creyentes de Bournemouth Coast. Allí yace la tumba de Mary Shelly, autora de Frankestein. Como curiosidad, si eres amante de las obras de arte, no está muy lejos del Russell-Cotes Art Gallery and Museum, donde encontrarás una gran variedad.

¡BONUS! – Stonehege y Durdle Door:

Uno de los enclaves más famosos del mundo con una mística especial que están a tan solo una hora de Bournemouth. Las famosas rocas de Stonehenge conforman un monumento megalítico que recibe miles de visitas diarias. Se calcula que fue construido aproximadamente entre finales del neolítico y principios de la edad de bronce. Un círculo interior de seis grandes bloques de piedra y un círculo exterior de diecisiete monolitos conforman este particular monumento cuyos elementos se alinean para marcar la salida y la puesta del sol durante los solsticios de verano e invierno.

Y, por último, es más que recomendable que acudas a visitar el Durdle Door, un arco natural de roca caliza que data de hace más de 140 millones de años, proyectándose desde el muro de acantilados y adentrándose en el mar. Una formación geológica de las más destacadas de todo Reino Unido con paisajes espectaculares e, incluso, románticos. Ideales para acudir al lugar en pareja puesto que, tras la playa, aguardan unas increíbles colinas verdes con vistas al mar que te transmitirán una maravillosa sensación de paz.

Por todo esto, Bournemouth Coast es un lugar especial y único que debes visitar, al menos, una vez en la vida. Una pequeña ciudad ideal para consolidar tu nivel de inglés dentro de nuestros cursos con monitor. ¿Te gustaría visitar una de las ciudades más importantes y conocidas de Europa e irte de allí con un inglés «nativo»?

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